Shakira, Shakira

Shakira vino a Madrid a dar un concierto en Las Ventas, hace un par de añitos por el mes de junio. Tres amigos y yo decidimos ir pasar el fin de semana a la ciudad Madrileña y acudir al concierto. La aventura comenzó la mañana del jueves en que salimos de Bilbao en el coche de un amigo. Me acuerdo que estábamos todos muy contentos y emocionados, así que el viaje se nos hizo relativamente corto.

A la entrada en Madrid, nos perdimos, tardamos más de 2 horas en llegar a Las Ventas. Pero eso no fue todo, para mas inri, cuando nos encontrábamos cerca del recinto tuvimos un pequeño toque con otro coche que no debió ver que estábamos parados en un semáforo. No fue nada, pero eso nos retuvo un rato haciendo papeles para el seguro.
Pero todas estas cosas se nos olvidaron enseguida, en el momento en el que llegamos a la plaza de Las Ventas y vimos el ambiente que había. Allí mismo nos juntamos con dos amigos de Madrid que más tarde nos iban a alojar en sus casas el fin de semana.

Nos adentramos en el recinto en cuanto abrieron, como pudimos. Lo mas difícil fue tomar una buena posición una vez dentro. No estábamos colocados muy cerca del escenario, pero estaba todo perfectamente preparado para que desde cualquier parte pudiéramos seguir el concierto sin problemas.

Cuando se apagaron las luces, salió ella, vestida con sus típicos atuendos y mostrando su contoneo de caderas desde el minuto 0. Un espectáculo más que para los oídos, para la vista diría yo. Las luces, los colores, bailarines... todo giraba entorno a ella.
Nos invitaba a todos a cantar y a movernos a su ritmo. Había momentos en los que un escalofrío recorría mi cuerpo. Recuerdo uno de ellos: Sonaba la canción de “suerte” todo el mundo cantaba, bailaba...Shakira se movía de un lado al otro del escenario, bailarines, luces.... y yo miraba a mi alrededor contemplándolo todo y quedándome alucinada. Ese fue para mi el momento “mágico” del concierto.

María